¡Felices!

6 de noviembre de 2017

Salmos 119.1-47

 

«Bienaventurados los perfectos de camino, los que andan en la ley de Jehová. Bienaventurados los que guardan sus testimonios, y con todo el corazón le buscan». Salmos 119. 1-2 (RVR1960)

 

Con bienaventuranzas, el salmista nos convida a la lectura de 176 versículos divididos en 22 secciones de 8 líneas usando como referencia las letras del alfabeto hebreo. Hace uso de imágenes bien pensadas y con un estilo poético articula sobre el valor único y sapiencial de los preceptos de Dios. 

De la lectura del salmo podemos decir que el salmista ha encontrado el más grande de los tesoros en la palabra de Dios.

«Bienaventurados los que guardan sus testimonios, y con todo el corazón le buscan». Esa palabra que se expresa en dichos, mandamientos, testimonio, justos juicios, estatutos, ley, palabra de verdad, entre otras, y que viene a ser para el salmista como vida a su vida.

Cada día de nuestra vida se precisa en búsqueda, tanto a nivel consciente como inconsciente. Pero, ¿qué estamos buscando? ¿Felicidad, dicha, prosperidad, gozo, liberación, guía, cambio, guardar sus caminos, hacer Su voluntad…? ¿Cómo y donde lo estamos buscando? No respondas estas preguntas sin antes ponderar la respuesta. Toma el tiempo necesario. El salmista también lo hizo. La estructura cuidada y la sustancia del contenido del salmo sirve en parte como evidencia. 

La palabra de Dios nos ayuda a descubrirlo. En ella, Él se revela, y en Jesús, el verbo de Dios, esa Palabra se hizo viva y testimonio para beneficio y promesa de todo aquel que en Él cree. De esta manera, Él se hace alcanzable y nosotros bienaventurados.

Oración

Señor, en la más profunda búsqueda, buscamos y encontramos en Ti y eso nos hace felices. En el nombre de Aquel que es Camino, Verdad y Vida. Jesucristo el Señor. Amén.