La niña con las burbujas
Semana 32 – Abril 2017
«Dejen que los niños vengan a mí. Ni se lo impidan porque el reino de los cielos es de los que son como ellos.» Lucas 18.16 (PDT)
En febrero cumplen mis dos sobrinos, Jan, quien cumplió 20 años y Esmeralda que alcanzó los 2 años. La selección de regalos fue distinta por múltiples razones, no solo por el factor edad sino por sus personalidades. Mi inquietud iba más allá de qué conseguirles, sino cómo hacer de ese regalo un momento especial. ¡Jamás pensé cuanto se podía divertir la pequeña con frasco de burbujas! En las tardes nos vamos al patio y la observo haciendo burbujas y persiguiéndolas. Su risa cada vez que atrapa en su tierna mano las esferas de jabón, inundan toda la comunidad.
El pasaje bíblico de esta ocasión refleja sin duda uno de los momentos más tiernos en el ministerio de Jesús. Es conocido que donde quiera Jesús llegaba las multitudes le seguían. Cada multitud con propósitos distintos, ciertamente. En más de una ocasión la gente se apretujaba para poder tener acceso al maestro. Es decir, que el encuentro con Dios encarnado implicaba en ocasiones esfuerzos inusitados. Pregúntenle a Zaqueo, quien se subió a un árbol con tal de ver siquiera a Jesús. Dialoguen con la mujer del flujo de sangre que se arrastró para tocarle.
Si a los adultos se les dificultaba en momentos tener acceso a Jesús, ¿cuánto más una niña o un niño de 2 años? ¿Con qué fuerza podía contar un menor de edad para abrirse camino en la multitud? ¿Tendría la habilidad suficiente para escalar por alguna rama cerca de Zaqueo? Sin duda, Jesús debió fijar su mirada en la niñez en cada encuentro en los pueblos y aldeas. Tal vez los vio escurriéndose entre las personas y asomar su carita para desde la distancia ver a Dios. ¿Nos acercamos a Dios cada día con esa mismo deseo y esfuerzo?
Gloria a Dios por el día, y debieron ser muchos, que Jesús detuvo el sermón, y reprendió a la audiencia que impedía que los chiquitines llegaran a él. Que lección sobre la lección en proceso. ¡Déjenlos! ¡Permitan que pasen! ¡De ellos es el Reino de los cielos!
Cántico: Jesús me pastorea
Oración: Señor, Te rogamos que podamos retornar a ese sentido de urgencia por estar a Tu lado. Devuélvenos la inocencia de quienes se asombran aun por las cosas sencillas de la vida. Amén.
Oportunidad de la semana: Como familia, procuren ofrecer labor voluntaria en un centro pre escolar. Ofrezca su colaboración en su iglesia con educación cristiana de la niñez. Dediquen una tarde a observar a la niñez de su comunidad.