Rvda. Carmen J. Landrón

Pastora Recurso ICDC Vega Alta II

Región 4

Celebrando la unidad familiar

• Llamado a la adoración:

La familia es un sistema que está vivo. Es un organismo vivo donde cada uno se sus miembros influencia a la función y el bienestar de los demás. Se compara con el cuerpo humano. El cuerpo tiene 12 sistemas que trabajan a nivel individual y a la vez se conecta con los demás. En ese enfoque la familia practica el espacio del Altar Familiar, celebrando juntos. Toda la familia participa.

Entonemos el cántico: “Estamos Reunidos”

Estamos reunidos aquí, Señor

porque hemos conocido tu amor,

y traemos en nuestros labios

un nuevo cántico de loor,

//Pues tu gloria ha llenado este lugar.//

• Oración de gratitud:

Te agradecemos Señor tus bendiciones, detalles, tu acompañamiento y te presentamos estos sagrados momentos para que sean de tu agrado. Amén.

• Entonemos el cántico: “En Momentos Así”

En momentos así, levanto mi voz,

Levanto mi canto a Cristo.

En momentos así, levanto mi ser

Levanto mis manos a Él.

//¡Cuánto te amo Dios!//

¡Cuánto te amo!

¡Dios te amo!

• Lectura Bíblica: (alternada)

Salmo 128.1-4

¹ Bienaventurado todo aquel que teme a Jehová,

que anda en sus caminos

² cuando comieres el trabajo de tus manos,

Bienaventurado serás, y te irá bien.

³ Tu mujer será como vid que lleva fruto

a los lados de tu casa;

Tus hijos como plantas de olivo

alrededor de tu mesa.

⁴ He aquí que así será bendecido

el hombre que teme a Jehová.

• Oración por la Palabra:

Bendice oh Dios esta Santa Palabra. Te pedimos que nos nutras con ella. Amén.

• Meditemos:

El Salmo 128.1-4 es una celebración a la unidad familiar. Describe las bendiciones que se obtienen bajo el temor a Jehová. Bajo la obediencia a Jehová. En este salmo se expresa la bendición del Señor en la vida familiar. Hay felicitaciones para los que tienen esa conducta o práctica. Sin perder tiempo el salmista introduce la escena familiar de comer del trabajo de las manos y la buena recompensa. Se utilizan símiles derivadas de la agricultura para describir la mujer y los hijos. Aunque el salmista se refiere a un contexto agrícola y a una interpretación patriarcal, podemos atemperarlo a una bendición final para los nietos y la ciudad y termina con la exclamación: ¡La paz sea!

• Oración en familia:

La familia realizará una dinámica donde cada persona debe decir el porqué bendice a su familia. Luego agarrados de las manos intercederán los unos por los otros.