SEMANA 45

6 de julio de 2017

Mateo 21.28-31b (TLA)

Jesús también les dijo: ¿Qué opinan ustedes de esto que voy a contarles?  Un hombre tenía dos hijos, y le dijo al mayor de ellos: “Hijo, ve a trabajar en la viña.  Él le respondió: “¡No quiero ir!”  Pero después cambió de idea y fue a trabajar.  Luego el hombre también le dijo a su hijo menor que fuera a trabajar, y él le respondió: “¡Sí, señor, iré!”  Pero el muchacho en verdad no fue.  ¿Cuál de los dos hijos hizo lo que el padre quería?

¿Qué puede decir esta parábola a los matrimonios?  Veamos, ambos hijos terminan haciendo lo contrario de lo que dijeron que harían.  Uno responde de forma descortés y desobediente, “No quiero”, sin embargo, “después se arrepintió y fue”.  Aquí la palabra “arrepentido” significa, cambio de interés, es decir, que le da importancia.  El otro, mostró lo contrario, “Sí Señor, voy, pero no fue”.  Profesa un interés, pero luego incumple.  ¿Te acuerdas de los votos matrimoniales en el altar?, “Prometo delante de Dios cuidarla(o), amarla(o), defenderla(o), ser fiel”, etc.  ¿Cuántos esposos(as) comienzan con un: “Sí, Señor”, pero luego no cumplen?  A los dos hijos algo les hizo cambiar de opinión e interés para obediencia o desobediencia.  ¿Qué te ha hecho cambiar de opinión, de interés, en relación a las promesas que hiciste en el altar?  El matrimonio es como una viña, conlleva cultivar la tierra, construir vallados y torres de vigilancia.  También necesita de unos cuidados.  ¿Has perdido el interés por tu pareja?  ¿Has descuidado tu matrimonio?  El Señor te dice hoy: “ve a trabajar en la viña”.  ¿Cuál será tu respuesta, “no quiero”, pero arrepentido cambias de opinión, de interés y le das importancia y cumples las promesas?  O decir, “Si, Señor”, ¿pero no haces nada?  Cantares 2.15 nos dice: “Atrapen las zorras, esas zorras pequeñas que arruinan el viñedo en flor”.

Cántico

Hacemos hoy ante Tu altar

Hacemos hoy ante Tu altar

un compromiso de vivir en santidad.

Hacemos hoy ante Tu altar

un pacto de hombres que Te quieren agradar.

Con manos limpias, corazón puro para Ti.

Hacemos hoy ante Tu altar

un compromiso de vivir en santidad.

Hacemos hoy ante Tu altar

un pacto de hombre que Te agradar.

Con manos limpias, corazón puro para Ti.

Cuidaré mis ojos, cuidaré mis manos,

cuidaré mi corazón, de todo lo vano,

de todo lo vano, no Te quiero fallar jamás.

Cuidare mis ojos, cuidare mis manos,

cuidare mi corazón, de todo lo vano,

de todo lo vano, no Te quiero fallar jamás.

Oración

Señor de nuestra viña, reconozco que he descuidado áreas de mi matrimonio que han debilitado el interés del cuidado y el amor hacia mi esposa(o).  Renueva mis fuerzas y, como el hijo arrepentido de la parábola, me muevo a hacer Tu voluntad y “a trabajar hoy en mi viña”, para fortalecerla y restaurarla.  En el nombre de Jesús, Te lo pido.  ¡Amén!

Oportunidad de la semana

Practica estos pequeños detalles para recuperar y fortalecer el interés el uno por el otro.  Flores sin motivo alguno.  Hacer algo juntos: jugar, viajar, orar, etc.  Sacrificar algo personal para darle gusto.  Llamar por teléfono para que no se preocupe.  Decir palabras de elogio.  Pedir perdón por algo y brindar perdón.  Apoyar en decisiones particulares.  Dar caricias.