Altar Familiar- 18 de abril

Pastor Edgardo Fuentes

Pastor ICDC Santa Rosa de Dorado

Región 4

Busquemos Su Reino

Lectura del Salmo 34 (NTV):

Alabaré al Señor en todo tiempo; a cada momento pronunciaré sus alabanzas. Solo en el Señor me jactaré; que todos los indefensos cobren ánimo. Vengan, hablemos de las grandezas del Señor; exaltemos juntos su nombre. Oré al Señor, y él me respondió; me libró de todos mis temores. Los que buscan su ayuda estarán radiantes de alegría; ninguna sombra de vergüenza les oscurecerá el rostro. En mi desesperación oré, y el Señor me escuchó; me salvó de todas mis dificultades”.

Oración de afirmación de la presencia del Señor:

Señor, en todo momento, en toda circunstancia y en toda ocasión, tu nombre merece ser exaltado. Tú has sido bueno con nosotros(as) y tus atenciones nunca cesan para tu creación. Es por eso que, afirmamos tu presencia en medio nuestro como baluarte y sostén en medio de tiempos convulsos. Queremos acercarnos a ti en esta hora y disfrutar de los inagotables beneficios que ofrece tu presencia. Concédenos tú cercanía y el poder sentir tu abrazo en este tiempo devocional. Nos reafirmamos en tu provisión, con la certeza de que tu oportuna gracia nos acompañará hoy y siempre. Amén.

Entonemos el cántico: “Dios está Aquí”

//Dios está aquí

tan cierto como el aire que respiro

tan cierto como en la mañana se levanta el sol

tan cierto que cuando le hablo, el me puede oír. //

Lectura Bíblica Alternada en Romanos 5.1-5 (NTV): 

Líder: Por lo tanto, ya que fuimos hechos justos a los ojos de Dios por medio de la fe, tenemos paz con Dios gracias a lo que Jesucristo nuestro Señor hizo por nosotros. 

Grupo: Debido a nuestra fe, Cristo nos hizo entrar en este lugar de privilegio inmerecido en el cual ahora permanecemos, y esperamos con confianza y alegría participar de la gloria de Dios.

Líder: También nos alegramos al enfrentar pruebas y dificultades porque sabemos que nos ayudan a desarrollar resistencia. 

Grupo: Y la resistencia desarrolla firmeza de carácter, y el carácter fortalece nuestra esperanza segura de salvación. 

TODOS(AS): Y esa esperanza no acabará en desilusión. Pues sabemos con cuánta ternura nos ama Dios, porque nos ha dado el Espíritu Santo para llenar nuestro corazón con su amor.

Entonemos el cántico: “Dios es nuestro amparo”

// Dios es nuestro amparo,

Nuestra fortaleza

Nuestro pronto auxilio en la tribulación.

Aunque se traspasen los montes a la mar

Aunque la tierra tiemble, tenemos que cantar. //

Oración de Intercesión:

Nos acercamos una vez más oh, Dios a ti, porque sin ti, nada somos. Porque reconocemos nuestra pequeñez, nuestra vulnerabilidad y en ocasiones, nuestra falta de fe. Nos acercamos a ti Señor, porque sabemos que te compadeces de nuestra condición débil y porque tus manos siempre están abiertas para sostenernos. Intercedemos porque no queremos olvidar que de ti proviene nuestra fuerza y que tú eres nuestro pronto auxilio en la tribulación. Te presentamos nuestras familias, nuestra Iglesia y nuestro país, de manera que nuestro ruego resuene en el trono de tu gracia y en la plena convicción de que solo en ti, hallamos plenitud de vida. Por Cristo Jesús, Señor nuestro. Amén.

Meditemos:

En el capítulo 12 de Lucas, versículos 22 al 34, los discípulos son enseñados por Jesús en cuanto al cuidado divino. El Maestro les invita a considerar los lirios y las aves del campo como evidencia de esa atención precisa del Padre celestial, que no olvida inclusive lo más remoto o simple en Su reino. Su exhortación es a buscar ese reino, en el cual existe provisión para todos(as) y a través del cual podemos constatar el carácter de nuestro Rey. Jesús recalca que el Padre disfruta el podernos hacer partícipes de Su herencia, y que encuentra suma complacencia en recompensar nuestra lealtad a Él. Los tiempos han cambiado y quizás las circunstancias históricas que enfrentamos no tengan precedente, pero lo cierto es que el carácter de nuestro Rey continúa fungiendo en función de Su reino y de aquellos(as) que con pasión lo buscamos. Su motivación para cuidarnos y sostenernos no ha cambiado ni ha sido alterada por esta nueva realidad social. Recordemos que aún lo más remoto, pequeño e indefenso recibe el trato personal y próximo de nuestro Rey, no solo para que se solidifique nuestra fe, sino para que animemos a otros(as) a confiar en Él. ¡Que así nos ayude el Señor!

Oración Final:

Señor, te agradecemos por Tu Palabra, esa que jamás retorna vacía y que siempre cumple el propósito por lo cual ha sido enviada. Te agradecemos porque nos recuerda nuestro lugar en Tu reino, lugar de privilegio y de herencia eterna. Gracias porque a través de nuestro Señor Jesucristo, podemos comenzar a disfrutar anticipadamente de ese reino maravilloso que se antepone ante cualquier adversidad o problema. Nos sentimos llenos(as) de ti. No hay manera en la que podamos sentirnos vacíos cuando procuramos tu presencia. Continúa hablando a nuestro corazón y que todo lo que se ha realizado en tu nombre, en este tiempo devocional, siga generando vida, plenitud de gozo y esperanza. En el nombre de Jesús oramos. Amén.

Cántico de cierre: “Cristo, te entronamos”

// Cristo, te entronamos

Te adoramos a Ti

Estamos aquí, ante tu presencia 

Tu nombre exaltado por siempre será 

Establece tu trono en medio de nuestra alabanza 

Establece tu trono en medio de nuestra alabanza

Establece tu trono en medio de nuestra alabanza 

Ven Jesús y toma tu lugar. //