15 de julio de 2019

15 de julio de 2019 

Rvdo. Miguel A. Morales Castro Pastor General 

Mateo 5.38-48 38Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente. 39Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra; 40y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa; 41y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos. 42Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses. 43Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. 44Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; 45para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos. 46Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos? 47Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los gentiles? 48Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto. 

(Porción Bíblica para el domingo, 21 de julio de 2019, Revista de Educación Cristiana El Discípulo) 

Muy amados en el Señor, 

¡Que la paz que sobrepasa todo entendimiento guarde nuestras mentes y corazones en Cristo Jesús! 

Hemos citado el pasaje a ser estudiado el próximo domingo, 21 de julio de 2019. En los pasados domingos hemos estudiado en el Sermón del Monte el llamado a ser sal y luz, a desprendernos de aquello que nos aparte de los valores del Reino y el próximo domingo recibiremos el llamado a amar a nuestros enemigos. Todo esto cuando el país vive la crisis causada por los arrestos de exfuncionarios del actual gobierno y la revelación de un chat privado del círculo íntimo del Gobernador del país. 

La Iglesia Cristiana (Discípulos de Cristo) en Puerto Rico rechaza con firmeza la naturaleza inmoral, corrupta e indecente que se desprende del chat privado del Gobernador Ricardo A. Rosselló Nevares. Condenamos los actos de corrupción que son investigados por el Gobierno Federal y que apuntan a otros señalamientos y arrestos en el futuro cercano. Todo ello deshonra ante el mundo entero a quienes vivimos en esta tierra borincana. 

Esta crisis impide la gobernanza eficiente y lacera nuestra imagen ante los mercados mundiales. Ello significa que los que sufrirán el golpe de las consecuencias será el pueblo y este es quien exige que se tomen las acciones correctivas por parte del Gobernador y de las ramas legislativas. 

Para emitir una opinión sobre el perdón, usaré una ilustración que me distancia un poco de la situación que estamos considerando. La ilustración es la siguiente: “Si las víctimas de un pedófilo y sus familiares perdonan al victimario, ello en sí no cualifica al victimario como maestro de escuela elemental”. 

Perdonar al señor Gobernador no lo cualifica para seguir gobernando. Habiendo dicho esto, nuestro consejo al pueblo es que perdonemos. Nuestro consejo, con mucho respeto, al señor Gobernador, es que piense primero en el pueblo. Entendemos que para construir una salida que no haga más daño que bien, amerita cierta planificación y desarrollo. Pero, prolongar más de lo debido esta crisis hace un daño mayor. 

Al pueblo, a todos los componentes de las tres ramas de gobierno y al señor Gobernador, les invitamos a leer y meditar en las palabras del Sermón del Monte. Adjuntamos las tres lecciones de estas semanas para su consideración y reflexión. Hacemos un llamado a la oración, a la búsqueda de los valores que definen nuestro pueblo y que personalmente creo se encuentran en la vida, persona y enseñanzas de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. 

A la Iglesia, les recuerdo que la luz nunca es definida por las tinieblas de su entorno. Todo lo contrario, la luz transforma su entorno dejando claro el camino que más conviene. Nunca impone una decisión, pero ilumina para que nos podamos mover por la vía correcta. 

Aunque somos la luz del mundo, la fuente de nuestra luz es Cristo. En ese sentido somos reflejo de los valores del Reino de los Cielos y la intensidad de nuestro reflejo está atada a nuestra unidad a Cristo y a la unidad del pueblo de Dios. No respondemos a las posiciones definidas por fuerzas político partidistas. Respondemos a los valores del Reino contenidos en la Palabra de Dios. Esa verdad bíblica es el foco de nuestra unidad y el poder de nuestra luz. 

Seamos sal y luz. Estemos dispuestos a desprendernos de lo que no conviene. Amemos como Cristo, sirvamos en Espíritu y en Verdad y compartamos las Buenas Nuevas. A eso nos llama el Señor. 

¡Que así nos ayude Dios! 

 

Lecciones-19-21-Revista-El-Discípulo-Julio-2019